La Biblia enseña en Proverbios 6:16, que hay siete cosas que el Eterno aborrece y la primera de ellas es el orgullo.
El orgullo es un error fatal, porque tiene la capacidad de disfrazarse de muchas formas. Somos expertos en encontrar pretextos para nuestras actitudes y lo que en otra persona tomamos por orgullo, en nuestra propia vida llamamos confianza en nosotros mismos, y esa es sin lugar a dudas, la esencia de la rebelión contra el Creador.
Por otro lado, el gran problema del orgullo es que no solo perjudica a la persona que lo posee, si no que perjudica también a quienes la rodean. No podemos considerar, pues, que sufrir orgullo es simplemente una falla insignificante; es más bien un problema muy perjudicial.
Escucha con oídos atentos esta importante enseñanza y deja que hable a tu corazón.